martes, 2 de agosto de 2011

Indicadores de progreso en ajedrez

Elo de Sergey Karjakin, un ejemplo del buen funcionamiento de un indicador

Como en prácticamente toda actividad humana en la vida, en ajedrez es muy importante tener un indicador que nos permita ir dando seguimiento al avance en el desarrollo de nuestro juego así como al cumplimiento de nuestras metas.

El Elo (rating de la Federación Internacional de Ajedrez, FIDE) es el indicador “natural” del ajedrez, ya que fue creado específicamente para tal fin, sin embargo, en nuestro país difícilmente se puede considerar con seriedad debido al casi nulo fomento que se hace por utilizarlo como tal. No obstante, si un ajedrecista quiere andar por el buen camino deportivo federado, es indispensable que lo cuide como la más importante de sus herramientas, debido a que es el principal elemento que exige la FIDE para reconocer la calidad y nivel de los ajedrecistas mediante la titulación de maestría en el ajedrez.

Un Candidato a Maestro de Ajedrez debe alcanzar 2200 puntos de Elo, un Maestro de la FIDE 2300, un Maestro Internacional 2400 y un Gran Maestro Internacional 2500 puntos. Hoy en día 3 ajedrecistas en el mundo superan los 2800 puntos de Elo y en algún momento el gran Garry Kasparov alcanzó la cifra record de 2851. Tal vez haya que otorgar nuevos títulos como el de un amigo que se autoproclamó Maestro Universal.

Volviendo al punto fundamental, como en México el Elo no funciona adecuadamente como indicador del progreso en ajedrez ya que la gran mayoría de los torneos que se organizan no se reportan para tal fin, a pesar de ser mínimos los requerimientos de la FIDE, entonces es necesario buscar otro tipo de indicadores en la parte técnica de la preparación ajedrecística.

La entrenadora Rusa Irina Mikhailova ya había expresado en su artículo “Modern methods for training a chess player” publicado en el año 2006 en la página www.chessok.com que es posible que un ajedrecista con un Elo de 2200 puntos en dos años de entrenamiento consiga el título de Maestro Internacional, lo cual logró demostrar con los resultados de sus atletas. Claro que su principal indicador era el Elo. También hay que considerar que Rusia es un país con mucha actividad y que, por ejemplo, tiene actualmente 144 torneos registrados ante la FIDE para su contabilidad de Elo en los próximos 8 meses.

En su artículo también nos deja una referencia significativa, que es lo que quiero rescatar, para que los mexicanos podamos establecer indicadores de progreso ajedrecístico al alcance de todos: 1.- El porcentaje de éxito de los programas de computo para el entrenamiento en ajedrez de la empresa Convekta Ltd. y 2.- los conocimientos ajedrecísticos necesarios para alcanzar lo que ella llama “base line” (línea base).

Los programas de entrenamiento se pueden comprar y descargar en línea desde la página mencionada. En cuanto al segundo indicador, la GM Mikhailova dice que para alcanzar este nivel (2200 Elo), el ajedrecista deberá: tener un repertorio de aperturas exitosamente comprobado que incluya dos aperturas con blancas y dos con negras; dominar la táctica en un 60 a 70% de éxito resolviendo problemas de un nivel intermedio de dificultad (esto con los programas de computo de entrenamiento); adquirir un firme conocimiento de las bases de la estrategia, por ejemplo, valorar una posición y reconocer sus elementos; estar familiarizado con de 15 a 25 planes de juego procedentes de las partidas clásicas del ajedrez; conocer aproximadamente 250 posiciones de finales típicos, su valoración, plan de juego y las tácticas comunes a ellas; finalmente, debe adquirir habilidades de trabajo con la computadora y con los programas de computo de entrenamiento.

Siguiendo la misma mecánica, cuando el ajedrecista termine sus dos años de entrenamiento a partir de la línea base, esencialmente deberá: haber ampliado su repertorio de aperturas a 3 o 4 con blancas e igual número para negras; aumentado el dominio de la táctica al 90%; conocer más de 100 planes de las partidas clásicas; dominar la técnica de los finales y aumentar el repertorio a aproximadamente 600 posiciones.

Todo esto se realiza mediante un entrenamiento diario de 4 horas y una gran cantidad de competencias tanto de preparación como fundamentales. Este método está comprobado que funciona.

De aquí podemos partir, para establecer la cantidad de conocimientos ajedrecísticos necesarios para alcanzar la fuerza de juego equivalente a los rangos de Elo que necesitemos medir y así conocer verdaderamente nuestro nivel en ajedrez.

Además podemos adaptar varias recomendaciones prácticas de otros Grandes Maestros del ajedrez como una de John Nunn que dice que antes de poner en práctica una línea de apertura en un torneo es necesario tener 50 partidas de entrenamiento con ella.

Los invito a que trabajen en ajedrez con un plan bien claro, a largo plazo y con metas realistas, aunque estas no puedan estar basadas, desafortunadamente en el Elo y que propongan indicadores basados en conocimientos ajedrecísticos. La próxima semana trataré de proponer uno conforme lo aquí expuesto.

Y para los que no pueden vivir sin las piezas ni el tablero les dejo la siguiente posición
Schultz, 1941
Juegan blancas y ganan

Hasta el siguiente Martes.

2 comentarios:

  1. Bonita posición!!
    Creo que encontré la solución:
    1.Nf4!! entregando el caballo a cambio de posicionar fuertemente al alfil
    1...Txf4 2.Ad7!! Que impide Ta4 aunque también evita que la torre busque otra casilla en la fila 'a' volviendo con Tf1 (con idea de Ta1, parando al peón) porque se jugaría 3.Ab5+.
    Lo mismo si las negras juegan 2..Tf3 entonces 3.Ag4 es aplastante.
    Como todos los finales, el entendimiento de la posición es mas importante (para encontrar una solución) que el calculo al azar de variantes, en mi opinión.
    Gracias por este gran blog, Sr. Gongora.
    Atte,
    Francisco Vela (Mexicano residente en Las Vegas, USA)

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  2. Hola,

    Tienes razón, en la variante y en el concepto.

    Saludos cordiales.

    Benjamín.

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