miércoles, 4 de diciembre de 2013

Inconformidad con la Administración de la Secretaría de Cultura del D.F.

DESTITUCIÓN DE LA SECRETARIA DE CULTURA DEL DF, Lucía García Noriega. MITIN jueves 5 de diciembre del 2013, 17:00 horas. Frente al Palacio del Jefe de Gobierno del D.F. Miguel Ángel Mancera.

Los artistas y trabajadores de la cultura pedimos la destitución de Lucía García Noriega por su probada ignorancia y por: 
- Cerrar las dos librerías del Pórtico, especializadas en la Ciudad de México.
- Liquidar la Orquesta Filarmónica Juvenil de la Ollin Yoliztli.
- Suspender fulminantemente el 4º Encuentro Nacional de Fagot
- Cancelar en el Centro Cultural José Martí el cine-club alternativo que tenía 15 de éxito entre los cinéfilos, así como los conciertos sabatinos que tenían más de 8 años funcionando, suspender las exposiciones temporales y los talleres de lenguas indígenas que eran gratuitos. 
- Aniquilar los exitosos tranvías culturales.
- Correr a más de 200 trabajadores, operadores de proyectos culturales.
- ¡Y por violar la Ley de Fomento Cultural del D.F.!

ASISTE AL MITIN el jueves 5 de diciembre del 2013 a las 17:00 horas frente al Palacio del Jefe de Gobierno del D.F. Miguel Ángel Mancera. 
Haz circular esta información para que el Jefe de Gobierno no tenga en la Secretaría de Cultura del D.F. a una persona que atenta contra los derechos de los trabajadores de la cultura y los habitantes de esta ciudad.


Compañeros les traemos nuevas, les pedimos que compartan.
¿SABÍAS QUE LOS EVENTOS Y LAS ACTIVIDADES CULTURALES EN EL D.F. HAN DISMINUIDO EN UN 90% DURANTE 2013?
¡ALTO A LA DESTRUCCIÓN DE LA CULTURA EN EL DF!
Sin lugar a dudas, la Secretaría de Cultura del Gobierno del Distrito Federal atraviesa por el peor momento de su historia.
Desde que tomó posesión de su cargo como titular de la dependencia capitalina, Lucía García Noriega, además del maltrato y hostigamiento laboral permanente, se ha dedicado sistemáticamente a desmontar las estructuras y los programas que contaban con una trayectoria sólida y estaban posicionados entre los habitantes, turistas y comunidad artística de la ciudad de México, dejando a la Secretaría de Cultura a la deriva sin programa, sin proyecto y sin guía.
Sin evaluación previa, comenzó por despedir a más de 200 trabajadores contratados por honorarios desbaratando una estructura consolidada, con probada capacidad, y suspendió durante el primer mes en el ejercicio de sus funciones el programa de Tranvías Culturales que había dado servicio durante 19 años y se encontraba arraigado en el gusto de los habitantes de la capital y los turistas que disfrutaban sus recorridos guiados por verdaderos especialistas en la historia de la ciudad de México y de sus edificios.
Como primera “gran acción”, en el mes de febrero emprendió el proyecto de Teatro en Pantalla, lo que desvirtúa la esencia de las representaciones y razón de ser del teatro, el proyecto no sólo evidenció la ignorancia y menosprecio hacia el trabajo escénico, sus creadores y su público, sino además, estuvo acompañado de obras de mala calidad y peor grabadas, que en nada agradaron al público, quien optó por no asistir y despreciar este proyecto inaugural de García Noriega, mismo que tuvo que ser suspendido ante el rechazo generalizado de la comunidad teatral y que en nada justifica las cifras millonarias destinadas a este fracaso. Como ejemplo, la función del 2 de marzo realizada en 17 espacios delegacionales, tuvo una asistencia de 1,200 personas y un costo de $2,400,000.00 en un solo día, lo que da un promedio de 70 asistentes por sitio y un costo de $1,700 pesos por cada persona beneficiada. Esto lo convierte en el evento más caro de todos los eventos realizados en la Ciudad de México en los últimos 10 años, incluyendo las Fiestas del Bicentenario.
A partir de ese momento, su carrera destructiva continuó con suspender acciones relevantes como la Agenda 21 de la Cultura, ignorando la co-presidencia que se había alcanzado el año anterior para la ciudad de México; el proyecto de Caleidoscopio presentado en la Zona Centro del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes y que fue dictaminado a favor con una cantidad de 500 mil pesos para su operación, lo canceló sin justificación alguna, escudándose que no trabajaría más para el CONACULTA; situación que refleja su ignorancia para operar proyectos de gran alcance en vinculación con otras dependencias.
Ha hecho a un lado, sin miramientos, el programa Reguilete que durante todo el año coordinaba y desarrollaba actividades infantiles en los recintos de la Secretaría y, entre otras tantas arbitrariedades, ignoró la posibilidad de hacer realidad el nuevo FARO (Fábrica de Artes y Oficios) de San Juan de Aragón, zona carente de servicios culturales, para lo cual dispone de recursos etiquetados por la Cámara de Diputados.
Desde el mes de agosto canceló las actividades culturales del Salón de Cabildos, recinto histórico dentro del Palacio del Ayuntamiento y pretendió entregárselo a la Dirección Administrativa de la Jefatura de Gobierno -quien no ha aceptado esta nueva encomienda- ignorando la responsabilidad que la Secretaría tiene sobre el recinto cultural según acuerdo de Alejandro Encinas, publicado en la Gaceta Oficial del Distrito Federal del 22 de septiembre de 2006. Desde junio no se ha llevado a cabo una sola ceremonia cívica y durante todo el año ha ignorado el Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMyC) en el Distrito Federal; al mismo tiempo cortó de tajo y sin explicación alguna la relación con el Consejo de Pueblos y Barrios Originarios del Distrito Federal cuyo decreto de creación colocaba a la Secretaría de Cultura como la entidad responsable de apoyarlo administrativamente. Dejó sin actividad el programa Circuito de Festivales cuya actividad proveía de actividades culturales en gran parte de la Ciudad, otorgando presencia continua a la Secretaría, contando con el respaldo de los gobiernos delegacionales, al tiempo que desdeñó a quienes se acercaron pidiendo su apoyo para la realización de nuevos proyectos; prácticamente eliminó el programa editorial de la Secretaría produciendo unos cuantos títulos sin unidad temática o criterio alguno; cerró las dos librerías El Pórtico de la Ciudad de México, sin abrir otra opción para que los capitalinos encontraran obras dedicadas al conocimiento de la urbe más importante del país; redujo hasta su desaparición los “Círculos Culturales”, entre otros importantes proyectos de vinculación comunitaria; eliminó los programas de fomento a la lectura y las ferias comunitarias de venta de libros.
En una decisión por demás arbitraria, ha determinado el cobro (sin distingo) de la infraestructura técnica administrada por la Secretaría de Cultura; así, escenarios, equipo de audio, templetes, planta de luz, entre otros son “rentados” a los solicitantes sin importar finalidad de proyectos o beneficios a la ciudadanía. Este tipo de apoyos significaban gran respaldo a la comunidad artística, Asociaciones Civiles y Organizaciones No Gubernamentales sin fines de lucro, al tiempo que procuraban el desarrollo de actividades culturales de manera permanente en la ciudad.
Por si lo anterior no fuera suficiente, en fechas recientes decidió suspender arbitrariamente el proyecto de la Orquesta Filarmónica Juvenil Ollin Yoliztli, en el que ella mismo etiquetó presupuesto a través del apoyo económico que otorga el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes para darle continuidad. Esta agrupación musical forma parte fundamental del desarrollo académico de los alumnos de la Escuela de Música “Vida y Movimiento” del Centro Cultural Ollin Yoliztli.
A todo esto puede agregarse la falta absoluta de programa cultural, la centralización total de las decisiones que se toman en la Secretaría dando por cancelada cualquier iniciativa de su equipo de trabajo; ocurrencias sin fundamento como el programa Diálogo Capital en el que se han invertido millonarios recursos que bien podrían haberse utilizado en otros trabajos y que sólo han servido para llevar un número reducido de alumnos de las Delegaciones políticas del sur de la Ciudad a participar en actividades multitudinarias con diversos propósitos como intercambio con niños de otras partes de la ciudad, leer El Principito o hacer trabajos manuales en torno a la importancia del maíz. Esos eventos (sólo tres durante 2013) duran medio día en promedio y en cada uno el derroche y el desperdicio de recursos es inaudito.
Aunado a ello el pasado mes de junio lanzó el proyecto Léelo, rólalo, regala un libro, que como cualquiera de sus ocurrencias (sin ningún sustento o análisis) no tuvo mayor impacto. Consistió en colocar cubos de colores en diferentes lugares, con el propósito de que las personas depositaran libros que ya habían leído; tal fue el fracaso de este otro proyecto millonario que los cubos se convirtieron en “basureros” y después de cinco meses fueron retirados para su desecho.
Desde el arranque de su gestión inició una campaña por la transformación de la estructura orgánica de la Secretaría, que a la fecha no se ha consolidado, y con ese pretexto canceló de palabra las atribuciones de las diferentes Coordinaciones, dejándolas sin posibilidad de actuar conforme a lo estipulado en el Estatuto General de Gobierno en tanto que a la Coordinación de Vinculación Cultural Comunitaria la ha sobrecargado de responsabilidades impidiendo con ello el buen funcionamiento de la dependencia a su cargo. Generando descontrol, confusión e inoperatividad de varias de las áreas que conforman la dependencia.
Algo de lo más preocupante es el subejercicio presupuestal que se presume inmenso, en virtud de que ella ha manejado la totalidad del presupuesto asignado a la Secretaría de manera discrecional, sin permitir la intervención de ninguna de las áreas que tienen tareas que cumplir y que ahora se han visto obligadas a desarrollarlas sin presupuesto, lo que resulta prácticamente imposible; de ahí que no se hayan alcanzado, de ninguna manera, los niveles de productividad y de presencia entre la ciudadanía que se lograban en años anteriores. Consecuencia de esta situación, los museos están evidenciando la falta absoluta de mantenimiento lo que ha derivado en el cierre parcial, por ejemplo, del Museo Panteón de San Fernando, recinto emblemático por mil razones pero, principalmente, por albergar el sepulcro de Don Benito Juárez, cuya benemérita memoria, evidentemente, poco le importa a Lucía García Noriega, secretaria de cultura del Distrito Federal.
Por lo anterior y más que se detalla en documento anexo, además de lo que se agrega a diario en menoscabo del quehacer cultural del Distrito Federal, exigimos al Dr. Miguel Ángel Mancera, Jefe de Gobierno de la Ciudad de México que en concordancia con su llamado a “Decidir Juntos” pero sobre todo en su responsabilidad de procurar el bienestar de los ciudadanos que lo han elegido, ordene la salida inmediata de Lucía García Noriega de la Secretaría de Cultura del Distrito Federal, por el bien de la Ciudad, del país y de su cultura. ¡Tenemos que actuar YA!
ANEXO:
ACCIONES RELEVANTES A LAS QUE NO SE LES HA DADO SEGUIMIENTO:
a) Agenda 21 de la Cultura: Premio a Mejor práctica cultural, co-presidencia ante la comisión de cultura de CGLU (Ciudades y Gobiernos Locales Unidos).
b) Consolidación de la Red de Desarrollo Cultural Comunitario.
c) Presentación e implementación de proyectos ante el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes Zona Centro.
d) Reguilete – Programa de actividades culturales para niños.
e) Faro de Aragón (antiguo cine Corregidora).
PROGRAMAS ELIMINADOS DE DESARROLLO CULTURAL COMUNITARIO
a) Convocatoria pública para apoyar proyectos culturales comunitarios.
b) Formación de Promotores Culturales.
c) Círculos Comunitarios.
d) PEATONAL Arte y política en el espacio público.
e) Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMyC) en el Distrito Federal – Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.
f) Práctica Comunitaria de jóvenes beneficiarios del Instituto de la Juventud del Distrito Federal
g) Participación interinstitucional en la recuperación de espacios públicos.
PROGRAMAS ELIMINADOS DE PATRIMONIO HISTÓRICO, ARTÍSTICO Y CULTURAL
a) Paseos culturales en Tranvías – Cancelación del programa y tranvías en desuso.
b) Salón Cabildos – Cerrado a visitas guiadas al público.
c) Ceremonias Cívicas – Disminución importante en la cantidad de ceremonias.
d) Los museos y los centros culturales sin presupuesto y con un mínimo de operación.
e) Vinculación con el Consejo de Pueblos y Barrios originarios – Sin presupuesto asignado.
PROGRAMAS ELIMINADOS DE ACCESO Y PARTICIPACIÓN
a) Foro itinerante El Blanquito.
b) Circuito de Festivales de la Ciudad de México.
c) Fomento a la lectura: letras en guardia, letras en llamas, sana sana leyendo una plana, ferias comunitarias, remate de libros, nuevos libro clubs.
d) Programa editorial detenido.
e) Librerías El Pórtico.
f) Muestra de Artes Escénicas.
g) Apoyos logísticos a grupos sociales y organizaciones (sin fines de lucro).
h) Implementación de tarifas sin distingo para uso de infraestructura.
i) Ningún presupuesto para proyectos de colectivos o artistas, así como presentaciones de artistas (conciertos) en espacios públicos.
PROGRAMAS ELIMINADOS DE DIVULGACIÓN CULTURAL
a) Chilanguía – revista cultural mensual.
b) Cartelera mensual.
c) Los materiales de difusión son preparados por un diseñador externo y revisados y autorizados por la titular.
PROGRAMAS ELIMINADOS DE COORDINACIÓN INTERINSTITUCIONAL
a) Falta de apoyo para implementación y seguimiento de ejes transversales: diversidad de género, equidad, adultos mayores, niños, jóvenes, discapacidad.
b) Falta de representación en Fideicomisos, Consejos y Comités de otras áreas de gobierno con las que se trabajaban agendas en común.
c) Nula vinculación con Embajadas.
d) Poca o nula comunicación e interacción con otras dependencias del GDF.
OTRAS ACCIONES IMPORTANTES EN DETRIMENTO DE LA POLÍTICA CULTURAL
a) Falta de reconocimiento y pago de los adeudos de ejercicios anteriores (proveedores).
b) Maltrato, hostigamiento laboral y trato indigno y ofensivo a colaboradores.
c) Despidos injustificados del personal (arriba de 200 entre personal de estructura y honorarios).
d) Falta de proyecto institucional. Los eventos en espacios públicos y las actividades de los recintos se definen por la titular de manera sorpresiva, sin planeación.
e) Contratación de dos Consejeros de Fomento y Desarrollo, a sabiendas que su relación con la institución debe ser de carácter honorífico (como lo señala la ley).
f) Visitas a los recintos para corroborar que la gente está en oficina, sin considerar que el trabajo de la Secretaría en su mayoría es de carácter territorial, en fines de semana y en periodos vacacionales.
g) Falta de comunicación con el personal. No existe disposición al diálogo.
h) Inclumplimiento de Marco Legal Cultural en algunos casos por falta de presupuesto y en otras por falta de interés.
i) Incumplimiento de las leyes para fortalecer el trabajo con la Comisión de Filmaciones y con el Fideicomiso para la Promoción y el Desarrollo del Cine Mexicano en el Distrito Federal (PROCINEDF).
j) Cierre o cancelación de actividades en la Galería de Arte de la Sala Ollín Yoliztli.
k) A la fecha, ninguna reunión con personal de base y sindicalizado de la Secretaría de Cultura.
l) Cancelación y destrucción de proyecto: “Orquesta Filarmónica Juvenil Ollín Yoliztli” conformada por los alumnos más destacados en diferentes disciplinas.
m) Descontento expresado respecto a condiciones de trabajo de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México y Orquesta Típica, entre otras agrupaciones musicales.
n) Cancelación de Ofrenda de Día de Muertos del Museo Panteón de San Fernando, proyecto comunitario (donde colaboran vecinos de la zona) sin costo para la dependencia.
o) Nula relación y desdén con la Comisión de Cultura de la ALDF, Sindicato Único de Músicos del Distrito Federal y Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana.
p) Desconocimiento y desinterés de procesos administrativos internos.
q) Ningún programa de mantenimiento a recintos culturales.
r) Centralización de decisiones sin escuchar opiniones de los responsables de las áreas que conforman la Secretaría; creación de grupo de “poder” conformado por cercanos a la titular desdeñando capacidades y experiencia de otros colaboradores de la dependencia.

Situaciones concretas que han afectado al Centro Cultural José Martí
1.-Cancelación de los conciertos sabatinos. (Conciertos con mucho arraigo en el público por tener más de 15 años de realizarse todos los sábados y 8 años de llevarse a cabo de manera ininterrupida.
2.-Cancelación del uso de los recursos autogenerados. Dinero que hace falta para el pago a artistas y pago de carpas para eventos al aire libre.
3.- Cancelación de los Maratones de Cine Alternativo del Martí, que ya tenían 15 años consecutivos de proyectarse en este centro.
4.- Cancelación de exposiciones temporales. (Ahora, éstas tienen que pasar por un “consejo” experto para dar su opinión calificada. Es por eso que también se canceló la exposición en el Xavier Villaurrutia de la Comunidad Trans, ya que, según, el consejo ésta no era de calidad. Aunque las razones del dictamen no lo dicen de manera formal, ni escrita).
Cabe Resaltar que:
En ningún momento nos han preguntado o han investigado la forma de trabajar del Centro Cultural José Martí y Xavier Villaurrutia. Ignoran el trabajo cercano que existe con la comunidad (público y artistas), por lo tanto ignoran, nuestro papel como facilitadores entre comunidad y gobierno. Nunca se han preguntado cómo le hacemos para tener una amplia oferta cultural con el mínimo de presupuesto.


El Problema Que Se Avecina:
Desde la oficina de la Secretaria de Cultura (donde todo se decide) se van a seleccionar los talleres para el Centro Cultural José Martí y Xavier Villaurrutia sin conocer cómo trabajamos, dónde se imparten y el tiempo que tienen impartiéndose los talleres.
En el caso del Villaurrutia, los talleres son la principal oferta cultural gratuita para el público.


Transcendió que:
Quieren cerrar el Centro Cultural José Martí y Xavier Villaurrutia.
1.- El primero, no se sabe exactamente porqué, pero el discurso girará en torno a que habrá “remodelación del espacio”. Lo único que se sabe es que quieren cambiar butacas que están buenas por otras que dicen que están mejor. El Centro Cultural José Martí sí requiere de una profunda remodelación; sin embargo, en los pendientes de obras a realizar en 2014, no está considerado este centro cultural.
2.-Y el segundo, porque existe un dictamen de Protección Civil. Efectivamente, el espacio se está hundiendo cada día más. Sin embargo, en los pendientes de obras para 2014 tampoco está considerado el Villaurrutia.

Comparto esta información que llegó a mi correo electrónico, yo no comulgo con las acciones de reclamo mediante mítines, plantones o marchas, pero sí considero necesario divulgar la opinión de las personas directamente afectadas. BGM.

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